Deborah Rohan
México. Santillana Ediciones, 2010
548 págs.
La vida de cada familia, de cada persona, está íntimamente vinculada a la historia de su país. Esta novela, basada en la saga de la familia palestina Moghrabi, nos narra la dicha y desdicha de un pueblo trágico que nunca perdió la esperanza.
Sus antepasados sufrieron la tiranía cruel del inmenso Imperio Otomano. Después, cayeron bajo el yugo de los ingleses con la promesa británica de que serían libres si cooperaban para luchar contra el mencionado imperio. Más tarde fueron presa del dominio de los judíos sionistas, quienes pusieron todos los medios para acorralarlos sin salida y, finalmente, despojarlos de su propia tierra, apoyados por las Naciones Unidas, cuya decisión no fue muy justa.
El lenguaje es en primera persona, con el que Kamel Moghrabi narra, a su hija, las impresionantes aventuras de su familia: durante una visita de tres días a su tierra natal, Kamel busca los rastros de sus antiguas posesiones y el lugar donde conoció a Haniya, quien sería su esposa y madre de sus hijos. El amor de los dos es modelo de fidelidad heroica. De igual manera, el libro resalta lo que es la verdadera amistad de un hombre íntegro y leal como Kamel.
