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Educar, A.C. El valor de cambiar el rumbo

Uno de los suburbios con más carencias de la zona metropolitana de la Ciudad de México es el Valle de Chalco. Las condiciones de vida dejan mucho que desear. La falta de servicios públicos básicos y las pocas oportunidades educativas han orillado por décadas a su gente a empleos ocasionales sin estabilidad ni proyección. La educación no es ya sólo un derecho, sino necesidad urgente.
El Valle de Chalco estaba formado por llanos y tierras cultivables, las principales actividades eran la agricultura y ganadería. Sin embargo, después de la década de los setenta, las severas crisis económicas nacionales obligaron a mucha gente de provincia a emigrar a la Ciudad de México en busca de empleo. Ante la poca oferta de viviendas económicas, muchos emigraron al Valle de Chalco, que comenzó a crecer desordenadamente.
Más tarde, el terremoto que sacudió a la Ciudad de México en 1985 dejó sin hogar a miles de personas, y con esto una nueva oleada de inmigrantes llegó a Chalco, donde ahora habitan casi dos millones de personas en condiciones poco favorables.
En medio de este panorama, en 1990 el Valle de Chalco recibió la visita de Juan Pablo II. Cerca de 500 mil personas escucharon la homilía de la Misa que celebró ahí, donde proclamó: «No podemos vivir y dormir tranquilos mientras miles de hermanos nuestros, muy cerca de nosotros, carecen de lo más indispensable para llevar una vida humana digna». Estas palabras dejaron profunda huella en un grupo de ciudadanos preocupados por el desarrollo de la zona.
Bajo esta iniciativa, ese mismo año, en un terreno donado por el Gobierno del Estado de México en el municipio de Ixtapaluca, nace Educar, A.C., una institución comprometida con la sociedad, que ofrece educación integral a niños y niñas de escasos recursos, a sus familias y a sus profesores.

EDUCACIÓN COMPROMETIDA E INTEGRAL

El objetivo no sólo es educar, sino hacerlo con el más alto nivel de excelencia académica, moral y cívica y lograr convertir el hogar de cada niño en una extensión de la educación y formación recibida.
Educar no se preocupa sólo de sus alumnos, sino de sus familias, por lo tanto, este proyecto incluye la escuela de padres, educación básica para adultos y cursos activos que ayudan a orientar de manera integral a las familias y, a través de estas, a la comunidad entera. Esta institución tiene a su cargo dos centros escolares: Acuautla y Meyalli, incorporados a la SEP, donde se imparten clases a nivel preescolar, primaria y secundaria.

NECESITAMOS TU AYUDA

Los alumnos de ambos centros escolares pagan una colegiatura muy por debajo de su costo real, con esto se fomenta la responsabilidad y la valoración de la ayuda recibida. Sin embargo, estas pequeñas aportaciones no son suficientes. Educar se sostiene gracias empresas y personas que otorgan sus donativos a través del Patronato de Educar, A.C.
El esfuerzo conjunto de familias del Valle de Chalco y de la sociedad que las respalda, son promesa y esperanza de un mañana con mejores oportunidades de desarrollo y de una vida más digna para muchos niños y familias que guardan para sus benefactores profunda gratitud.

EDUCAR EN CIFRAS

-En 1992 contaba con 70 alumnos
-Hoy se atiende a más de 500 alumnos y sus familias.
-Atiende directamente a más de 10 mil 500 integrantes de la población.
-Su labor ha repercutido en cerca de 30 mil personas.
-Imparte formación para niños y jóvenes, educación básica para adultos y escuela de padres.

HASTA AHORA SE HAN CONSTRUIDO

-51 aulas de clase.
-Biblioteca.
-Salones de dirección, administración y de atención a padres de familia.
-Laboratorios de física, química y computación. Talleres diversos.

NECESIDADES URGENTES

-Ampliar la escuela de cómputo.
-Iniciar el proyecto de preparatoria.
-Incrementar la capacitación a profesores.
-Ampliar las instalaciones.

CAMBIANDO PERSPECTIVAS

«Yo nunca había oído hablar de eso que llaman virtudes. Se me hizo algo raro cuando mi hijo entró en la escuela y empezó a explicarme esas cosas. Poco a poco, él se iba haciendo más alegre, cariñoso y servicial. Eso me llamó mucho la atención y, cuando me invitaron a los cursos para padres, descubrí muchas otras cosas sobre la importancia que tengo como mujer y que tiene toda mi familia».

Esperanza Ríos, madre de familia

«La llegada de Educar fue mi salvación, no nada más para mí, sino para mi esposo. Educar nos ha ayudado tanto como pareja como individualmente. Agradezco la ayuda que me han dado para cuidar mi mayor tesoro: mi esposo y mis hijos».
Sra. Mara Chávez

Algunos alumnos opinan también:

«Me encanta mi escuela porque aprendo para ser alguien el día de mañana».
«Mi relación con mis padres es mejor a partir de que hemos aprendido mucho en Educar».

istmo review
No. 386 
Junio – Julio 2023

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